Penicilina

Inventos que fueron descubiertos de casualidad

Aunque muchos de los grandes inventos surgieron como resultado directo de arduas investigaciones, hay estudios que indican que alrededor del 30-50% de los inventos o descubrimientos ocurren por casualidad, dado que en ocasiones son pensados con fines diferentes a los que se obtienen.

Inventos descubiertos por casualidad

Contrario a lo que muchas personas podrían llegar a pensar, una gran cantidad de las cosas que se usan y ayudan a hacer que la vida sea más sencilla, son inventos que fueron descubiertos de casualidad, y entre ellos destacan los siguientes:

Post-it

Uno de los inventos más usados cada día, especialmente dentro del ámbito laboral e incluso en el personal, y que surgió por pura casualidad, consisten en el post-it.

Sus creadores, Spencer Silver y Art Fry, lo inventaron después de descubrir que el adhesivo de baja adherencia elaborado dentro de su laboratorio podía tener otro uso diferente al original, al utilizarlo para pegar papelitos en los libros sin preocuparse porque las hojas pudieran dañarse.

Horno de microondas

Creado por Percy Spencer, el horno de microondas se encuentra igualmente entre los inventos casuales.

El mismo fue descubierto durante el año 1946, época en la que Spencer investigaba el radar con un tubo vacío, y se percató que un dulce que llevaba en el bolsillo terminó deshaciéndose.

Fue en ese momento que comenzó a pensar en los numerosos usos que podría tener el dispositivo y con su invento, realmente logró revolucionar la historia.

Marcapasos

Otro invento que fue descubierto por casualidad, por John Hopps, consiste en el marcapasos.

Este descubrimiento surgió mientras Hopps investigaba la hipotermia, ya que al utilizar calefacción de frecuencia de radio logró observar que era posible estimular el latido del corazón de forma artificial, a fin de hacerlo funcionar.

Coca-Cola

El refresco más reconocido a nivel global, desarrollado por un farmaceuta John Pemberton durante el año 1886, también es un invento casual, dado que en sus inicios era comercializado como una medicina que buscaba aliviar tanto las náuseas como el dolor de cabeza.

Sin embargo, aquello que comenzó siendo un remedio preparado con semillas de nuez y hojas de coca (denominado “Vino francés de coca de Pemberton” por el propio farmacéutico), acabó convirtiéndose en la bebida más vendida a nivel mundial.

Sin embargo, cabe decir que ese éxito comercial llegó solo en el momento en que Frank Robinson cambió su nombre, y se encargó de diseñar el popular logo que ha llegado hasta la actualidad.

Penicilina

No se puede negar que la penicilina destaca por haber sido un gran invento que llegó a cambiar completamente la vida del ser humano.

Descubierta por Sir Alexander Fleming mientras se encontraba en busca de alguna poderosa cura para diversas enfermedades, aunque no lograba tener buenos resultados.

Y es que fue justamente debido a un experimento sobre una placa de Petri contaminada y desechada, es que Fleming logró observar que el moho creado era capaz de disolver una bacteria.

Fue de este modo como surgió el poderoso antibiótico que logró salvar la vida de millones de personas alrededor del mundo.

Velcro

El ingeniero George de Mestral,  durante el año 1941 se encontraba paseando su perro en el momento que se dio cuenta de lo complicado que resultaba quitarse los frutos de ciertos cardos Arctium bardana (principalmente llamados “arrancamoños”), los cuales terminaban adheridos no solo a su pantalón, sino también al pelo de su mascota.

Así, esa planta pegajosa sirvió de inspiración para que este ingeniero logrará inventar el velcro, que en sus inicios tenía el propósito de ser usado a manera de sujetador para la ropa.

Cerillas

En el año 1826, John Walker, fue un químico que rozó accidentalmente un palillo cubierto de químicos secos contra su chimenea, generando llamas intensas.

Inmediatamente logró darse cuenta de que ante él estaba el descubrimiento de algo que no existía hasta el momento, razón por la cual empezó a comercializar el nuevo producto, llamándolo “luces de fricción”.

Sin embargo, alguien más se interesó en esa misma idea y se encargó de hacer que la misma fuera incluso más práctica, fue así como ese competidor comenzó a comercializar los palillos dentro de pequeñas cajas que incluían una tira de papel lija, pero al comienzo, este producto era llamado “Lucifer”, haciendo referencia a las llamas del diablo.

Cereal

Los hermanos y empresarios Kellogg, Will y John, durante el año 1898 trataban de hervir con el fin de crear granola y por accidente, terminaron dejando sobre la estufa una taza con granos cocidos durante varios días.

Esto causó que la mezcla acabara volviéndose mohosa, sin embargo, el producto que surgió se encontraba seco y era grueso, partiendo de esto, después de varios experimentos más, consiguieron inventar el cereal.

Rayos X

Finalmente, alrededor del año 1900 se llevó a cabo el descubrimiento tanto de la radiación como de las ondas de radio, fuerzas que pese a ser imposible ver, se encontraban presentes, y se podía comprobar su existencia a través del uso de instrumental técnico.

Dichos fenómenos inexplicables despertaron el interés de Wilhelm Röntgen, un físico de origen alemán que empezó a experimentar con gas y rayos catódicos, y durante una de sus sesiones logró hacer que la electricidad corriera a través del gas, haciendo que el tubo empezara a brillar.

Asimismo, percibió que un producto químico dejó un rastro sobre un cartón negro que debía encargarse de evitar que la luz se escapara. A esto lo nombro “X”, por desconocido.